"Black Mirror" no es realmente una mirada al futuro. No dejes que esta serie diseñada para conseguir atención de las mayorías moldee tu percepción de los avances que estamos teniendo. Piénsalo así: los escritores de la serie no están interesados en presentar elementos balanceados en la serie, esto la haría aburrida y tampoco les interesa profundizar/filosofar realmente sobre los escenarios distópicos que proponen porque esto haría densos e incomprensibles los capítulos para las mayorías. Cuando diseñas para las mayorías, tienes que ser aterrador/entretenido totalmente, no intelectual/analítico.
Por el amor de todos los cielos: no veas cosas en Netflix/YouTube/TikTok y pienses que eres más inteligente que los demás porque de alguna manera crees que has accedido a una verdad que los demás no entendemos. "Lo mejor" que puedas consumir ahí está basado en grandes libros y ensayos que muchos ya leímos años (o décadas) atrás.
¿Habrá cosas malas en el futuro? Hijo de la vida, sí, claro, como siempre, pero no tienes idea de lo afortunado que somos tú y yo al poder vivir bien con nuestras nulas habilidades de sobreviviencia y patética capacidad de construir cosas con nuestras manos. Tener la facilidad de ir al supermercado y encontrar ahí cómodamente lo que necesitamos y más es una maravilla de la humanidad que no apreciamos. Y ahora con poquitos clics podemos recibir las cosas mágicamente en la puerta de nuestra casa. Y el día que exista el compilador de materia descrito en "The Diamond Age" de Neal Stephenson podremos generar lo que sea en este aparato que primero nos parecerá magia y después lucirá normal, como siempre ocurre con la tecnología genial.
No pongas atención de forma seria al contenido de las noticias a diario. El tiempo que pones atención aquí es mejor utilizado leyendo artículos en la HBR, Wired y así o novelas de Liu Cixin o Neal Stephenson.
No rebotes tus ideas con tu mismo círculo de siempre en WhatsApp quienes con mil y un señales claras te han demostrado en los últimos años que no les interesa crecer ni personal ni profesionalmente. Una cosa es lo que uno dice y otra lo que uno hace.
No se trata de ser tecno-optimista a lo tonto y pensar que la felicidad nos va a llegar por comprar los últimos gagdets o suscribirnos a las mejores plataformas. No va por ahí. Pero sí se trata de poder entender las opciones que se están formando frente a nosotros y cuáles de ellas van a permitir ejecutar de forma optimizada ciertos aspectos que hoy nos afectan de una forma u otra.
Listo. A continuación algunas notas rápidas sobre algunos de los desarrollos más interesantes que veo para el próximo año.
El "futuro" en 2024 ↓
Xiaomi —smartphones— acaba de lanzar su primer vehículo eléctrico (EV). Tienen como meta convertirse en uno de los cinco principales fabricantes de automóviles. ¿Por qué este "cambio"? Al final, todo se basa en datos. Los nuevos EVs son básicamente computadoras andantes. Procesan tus gustos musicales, de entretenimiento, los lugares que frecuentas, las conversaciones que tienes, todo al mismo tiempo que van escaneando en tiempo real todos los caminos, espacios e interacciones a tu alrededor. Este alud de datos propietarios les permite colocarse mejor en análisis de inteligencia de mercado para muchos otros movimientos de negocios ganadores.
Figure —robots humanoides con AI— dice en su sitio web de contrataciones de ingenieros que lanzarán al mercado sus robots humanoides en menos de dos años. El Optimus de Tesla está ya en su segunda versión. Estos dos dejarán pronto atrás a Boston Dynamics quien a pesar de ser el líder en investigación y desarrollo de movimiento robótico bípedo y demás se mantiene como una compañía que no es rentable y que no tiene claro cómo lo logrará.
Jeff Bezos —fundador de Amazon— anuncia en su entrevista con Lex Fridman que su empresa espacial Blue Origin ya está instalando naves con la capacidad computacional enorme que será requerida para las futuras fábricas industriales masivas que colocaremos en órbita para hacer de la Tierra un lugar sin contaminación. Este movimiento es similar al que ejecutó con con AWS en su momento, pero ahora en una dimensión mucho más ambiciosa. Galáctica, nada menos.
La Cybertruck funciona como un generador de energía eléctrica que puedes conectar a la infraestructura de tu hogar cuando no tengas electricidad. Y también tendrá pronto capacidad anfibia.
La Unión Europea continúa con su tendencia histórica de quedarse voluntariamente atrás en la innovación tecnológica al ponerle freno a sus startups con su nuevo marco regulatorio en inteligencia artificial. Europa ha dejado de ser un jugador relevante en el mundo de la alta tecnología desde hace mucho tiempo y no hay manera de que se recuperen pronto. Alemania y España están tontamente poniendo fuera de servicio sus plantas nucleares por ideas anacrónicas de peligrosas cuando esta ha demostrado ser la solución más óptima que la humanidad domina hoy en día para la generación de energía limpia.
Elon Musk no tiene necesidad de crear una nueva empresa que fabrique celulares. Se está enfocando en la siguiente gran plataforma de comunicación que la humanidad necesitará: la interfaz cerebro-máquina con dispositivos instalados en nuestro cerebro para poder interactuar de manera más optimizada con los sistemas que nos rodean. Esto suena apocalíptico para muchos, pero lo que la gente no entiende es que esto es básicamente lo que ya llevamos más de una década haciendo cargando voluntariamente nuestro celular a todas partes, solo que nuestro ritmo es más lento y externo a nuestro cuerpo.
La recepción que tendrá en el mercado el nuevo visor de realidad mezclada de Apple es un misterio. A mí, que soy fan de sus productos, no me tiene entusiasmado. Tal vez es porque todo lo que he probado hasta el día de hoy que involucra un casco y botones ha sido un asquito en su interfaz de usuario y/o rango de movimientos y/o precisión y/o contenido. Meta trabajando en la base socioeconómica baja para el metaverso y Apple en la franja superior indican que esto no es un experimento de vanidad sino que hay expectativas bastantes serias para conquistar desde el inicio la próxima nueva gran plataforma.
OpenAI tendrá que meterse a hardware eventualmente. En su origen, incluso consideraron ser una empresa de robots, pero por consideraciones de velocidad para poner productos rápidamente en el mercado decidieron enfocarse solamente en la parte de software de la inteligencia artificial. Sin embargo, si logran consolidar su supremacía a través de ChatGPT, necesitan el siguiente gran moat para sus productos y esto no puede ser otra cosa más que un dispositivo.
La computación cuántica ya no recibe tanto ruido como antes, pero sigue avanzando de manera contundente. Hace unas semanas, estuve en una plática de una startup que está trabajando fuertemente en esto. Su pronóstico es tener computadoras cuánticas comerciales a la venta antes de finalizar la década. El Q Day es cada vez más una amenaza (El Q Day se refiere al día en que todos los secretos gubernamentales, documentos personales, finanzas, inversiones, tecnología y demás que hemos protegido con nuestros modelos más poderosos de criptografía moderna quedan expuestos porque la increíble capacidad de lo cuántico destruye como hojas de papel esa protección digital basada en lo binario).
Sé curioso. No me creas. Investiga lo que está aquí. Platica y rebota con la inteligencia artificial y estas notas. Aprende los términos que te resultan exóticos. Determina para ti qué tiene sentido y qué no. Profundiza. No te quedes con lo que un tipo desconocido te dice aquí en internet.
Te quiero, querida lectora.
Y quiero que veas las posibilidades.
Y que construyas sobre lo nuevo, sobre lo que viene.
Y que tengas una buena vida.
Y eso lo conseguimos entendiendo bien lo que está pasando.
Sé audaz con el futuro.
Y selo ahora (y en el futuro).
—A.