Yo soy una de esas personas a las que les encanta complicar las cosas innecesariamente. Ya sabes, de esos que les fascina agregar complejidad tecnológica a procesos que llevan tiempo funcionando "bien" sin mis ideas innovadoras.
"Aarón, ¿entonces está mal innovar?" Creo que está mal llegar con la intención de innovar por innovar. He aprendido que lo más importante —lo más pro— antes de aventar ideas y propuestas es escuchar y entender a profundidad qué demonios es lo que la estructura actual hace y cuál es la lógica detrás de sus procesos.
Mira, es fácil sugerir una nueva plataforma, nuevo código, nuevos dispositivos, nueva infraestructura, nuevas metodologías. Cualquiera lo hace. Y todos los que tenemos facilidad de palabra te podemos convencer de los argumentos positivos para hacer el cambio a nuestras soluciones. Te digo esto porque tu trabajo como dueño de negocio es moverte en la delgada línea entre defender lo que ya te funciona y abrazar lo que te podría impulsar mucho más.
Tu trabajo como dueño de negocio es moverte en la delgada línea entre defender lo que ya te funciona y abrazar lo que te podría impulsar mucho más.
Hablemos de Blockchain, por ejemplo, que tiene como cinco casos de uso útiles andando en el mundo versus la solución casi omnipresente en la que todos los tech nerds pensábamos que se iba a convertir en poco tiempo. Blockchain tiene muchísimas ventajas potenciales en cadena de suministro, finanzas y demás sistemas complejos de la industria moderna, pero hay una razón por la cual los tomadores de decisiones de alto nivel jamás migraron rápidamente hacia esta tecnología y es lo que muchos emprendedores novatos no entienden: el core, el núcleo del negocio, no se toca a menos que sea extremadamente necesario.
El core, el núcleo del negocio, no se toca a menos que sea extremadamente necesario.
Los defensores a ultranza de Blockchain caen en el mismo error del fanatismo que los de Apple o los del Real Madrid o los del Partido Demócrata y etcétera: pierden al no ser pragmáticos y tomar lo que sí funciona y mejorar lo que definitivamente no. Blockchain es lento, poco confiable, difícil de entender e innecesario en la mayoría de aplicaciones en las cuales intentan meterlo y mientras no acepten esto, seguirán topándose con pared.
No es mi intención aquí atacar el mundo cripto. Soy fan. Tengo cripto. Sigo de cerca esta industria y creo que tiene mucho potencial. Lo que busco es ilustrar esta necedad de novatos en querer "innovar por innovar" sin cuidar lo que yo llamo el "núcleo", el "core", lo que ya pone pan en la mesa de forma consistente.
Cuando innovas sin pensar a profundidad, atacas a lo tonto el núcleo de tu negocio y tus ventas sufren. Las grandes compañías entienden que esto de cuidar el core es vital y por eso lucen lentas para los tech nerds que llegamos al mundo a proponer soluciones a diestra y siniestra, por eso la innovación nunca va a llegar dentro de una gran corporación sino de un conjunto de chavitos entusiastas e inexpertos que no tienen realmente nada que proteger.
Hoy te estoy hablando a ti, querido dueño de un negocio que ya tiene ganancias consistentes: no necesitas todo eso que te muchos a tu alrededor te están insistiendo que utilices en tu empresa.
Hay un concepto muy establecido en la industria para esos adornos que lucen bien: "Nice-to-Have" (NTH), algo que sería bonito, agradable, ideal, pero no es vital ni estratégico.
Tú enfócate en los "Must-Have" (MH), esos elementos que sí deben estar integrados en tu núcleo para permitir que tu máquinita de hacer dinero funcione siempre bien.
Un Nice-to-Have —por ejemplo— cuando estás empezando como emprendedor es tener un recepcionista/asistente. A ver, hijo de la vida, ni eres tan importante ni estás tan ocupado ni realmente necesitas esto. Es ego. Es más, la oficina que estás rentando es innecesaria. Sé perfectamente de lo que te hablo y sé que me entiendes, pero no es fácil de aceptar porque todos operamos con el marco de referencia de lo que creemos que es un empresario y eso dicta "oficina" y "secretaria" automáticamente aunque ya no es así.
Un Must-Have —por ejemplo— es tener un proceso de cobro que sea fácil para el cliente: aceptar efectivo, transferencias, tarjetas bancarias y demás. Entre más fácil hagas que el dinero fluya hacia ti, mejor.
En resumen: no innoves por innovar, no te sientas mal por no instalar lo último en tecnología en tu empresa mientras sepas que lo estás haciendo por proteger el core de lo que funciona y determina que es un NTH vs un MH.
Haz dinero. Construye riqueza. Ten un negocio chingón.
Te quiero en tu versión de alto desempeño.
Va con amor y alpha, como siempre.
Sé audaz. Y selo ahora.
—A.